Esteban Bethencourt o La imperiosa necesidad de proteger los chorizos canarios

Como tantos honrados ciudadanos, estoy rebosante de felicidad porque al bueno de Esteban Bethencourt (ex alcalde canario, procesado y condenado por robar dinero a sus vecinos) los jueces de Madrid lo han salvado de la cárcel después de ser declarado ladrón en Canarias [1].

Esas decisiones me parecen edificantes. Me congratulo del buen corazón de sus supremas Señorías y de que no se crucifique a los buenos ladrones, como le sucedió a Dimas por no contar con los jueces adecuados (en el entorno de Poncio Pilatos, se entiende).

Con quienes no debe haber piedad es con los que roban artículos en los supermercados para dar de comer a sus hijos. A esos, ni agua. Podrían haber nacido ricos o meterse en política en lugar de trabajar donde tarde o temprano iban a dejarles parados. ¡Leña con ellos! Se lo han buscado solitos.

Caso bien distinto es el de don Esteban Bethencourt, alcalde y parlamentario, al que deberíamos presentar a nuestros hijos como virtuoso ejemplo a seguir. Él, según los jueces que lo juzgaron en Canarias, solamente se metió en el bolsillo el dinero del pueblo. El bendito suelo  de los supermercados o grandes superficies no lo pisó ni, mucho menos, lo profanó.

Naturalmente, un supermercado es más sagrado que un pueblo. Por eso, cuando te  detectan una sandía o media docena de huevos en el bolso es probable que vayas a prisión antes que si encuentran en tu cuenta corriente un millón de pesetas, de dólares o de euros robados.

Por eso, me parece bien que obliguen a repetir el proceso a don Esteban. Que le cambien  el jurado y el juez (por si se les ocurriese condenarle otra vez) y que en esta ocasión los autos tengan una duración de cinco, diez o más años, si se estimara conveniente. Al menos, hasta que el juez averigüe la suma exacta (imagino que al céntimo) que mangó el susodicho Excelentísimo Esteban.

Si no la adivina, no podrá condenarlo. ¡Ahora es evidente que el tribunal anterior debió haber contratado a la Bruja Lola como ayudante y, por dejación, no lo hizo!

Ya va siendo hora de que caigamos en la cuenta de que la justicia debe avanzar  lenta, lejana y letárgica para que no pierda su ceguera. ¡No hay derecho a que un jurado popular condene, a las primeras de cambio, a nuestros amados políticos por el simple hecho de robarnos el dinero público! ¡Un respetito es muy bonito!

Por otra parte, mir’usted, señor Bethencourt, a los canarios siempre nos ha gustado tener algún choricito en casa, ¡sobre todo si es de perro![2] Así que no tema presentarse de nuevo al Parlamento por La Gomera. Sin duda, volverán a votarle. Como a Dimas el Buen Ladrón, le perdonarán sus pecados, aunque no sea usted de Jerusalén ni de Teguise.

_____________

NOTAS

1. «El diputado por Coalición Canaria y ex alcalde de Valle Gran Rey (La Gomera) fue declarado culpable el pasado mes de diciembre por un tribunal popular por un delito de malversación de caudales públicos cometido mediante el cobro ilegal de dietas y gastos en 1999. La Sala de lo Civil y Penal del TSJC condenó a cuatro años de prisión y a diez de inhabilitación absoluta para el ejercicio de cualquier cargo público al diputado de CC.

[… El Tribunal Supremo] estima que si bien el informe pericial indica la posibilidad de la existencia de una malversación por parte del ex alcalde de Valle Gran Rey, ni el jurado ha aclarado debidamente cuál sería su cuantía y la razón de establecerla en una cifra concreta, ni el magistrado-presidente ha podido precisarlo en la sentencia.

[… por tanto, el TS ha actuado] casando y anulando la sentencia impugnada y anulando el juicio de instancia, remitiendo las actuaciones al Tribunal de procedencia para la celebración de un nuevo juicio con nuevo tribunal del jurado presidido por distinto magistrado-presidente.» (Europa Press, 13.09.2010).

2. El «chorizo de perro» es típico en el archipiélago y constituye la versión canaria de la sobrasada mallorquina.

Enriquece este artículo con un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Powered by WordPress.com.

Up ↑

Descubre más desde Manuel Mora Morales

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo