A los ojos del pueblo la madre Catalina de Jesús y el Maestro Juan se habían convertidos en auténticos héroes multitudinarios y en víctimas de la odiada y temida Inquisición que los mantuvo presos durante cuatro años antes de que fueran juzgados por andar metiendo las manos debajo de faldas y sotanas.
Un sugerente vídeo sobre los cofrades o la vida loca del pasito a pasito
Les encanta recibir órdenes y reprimendas de un señor encapuchado que les va gritando como un sargento, también les gusta dar pasitos al son de un tambor, cargar un peso tremendo, vestir un batilongo y sentir que sus compañeros caminan pegaditos a sus espaldas echándoles el aliento en la nuca y colocando la manita en su hombro. [Ver el "sugerente" vídeo]