Cuando los gringos quemaban al Papa de Roma

UNA TRADICIÓN PARA QUEMAR AL PAPA DE ROMA

Cada 5 de noviembre en los Estados Unidos se celebraba una fiesta muy británica: quemar imágenes del Papa católico de Roma. Todo iba bien hasta que se planteó un problema serio cuando George Washington solicitó la ayuda de Francia y España para que lo apoyaran en la Guerra de Independencia contra Gran Bretaña.

Era evidente que franceses y españoles no verían con buenos ojos que icinerasen la imagen de su líder espiritual. Y, mucho menos,  que lo hicieran aquellos colonos rebeldes por quienes sus soldados iban a dar la vida. Los muy católicos reyes de Francia y España, su Majestad Cristianísima Luis XVI y su Majestad Católica Carlos III, no se sentirían cómodos cuando los revolucionarios norteamericanos encendieran sus hogueras el día 5 de noviembre. De manera que los cabecillas norteamericanos deberían tomar una decisión al respecto.

ORÍGENES DE LA «NOCHE DE LAS HOGUERAS»

El protagonista de la película V de Vendetta está inspirado en un inglés llamado Guy de Fawkes, quien, el 5 de noviembre de 1605, encabezó la Conspiración de la pólvora, un complot urdido por un grupo de católicos romanos para hacer explotar el edificio del parlamento británico. Trataban de matar al rey Jacobo I con el fin de desencadenar una rebelión para entronizar al príncipe Carlos, que era católico. La conspiración fue descubierta a tiempo. Fawkes fue detenido y ejecutado.

Desde entonces, el 5 de noviembre, para celebrar el fracaso de aquel complot, tiene lugar la Noche de las Hogueras (Bonfire Night) en el Reino Unido, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Terranova y Canadá. Al principio, se quemaba la imagen de Guy Fawkes, pero, con el tiempo, fue sustituida por la del Papa.

NOCHE

LA DETERMINACIÓN DE WASHINGTON

Esta tradición no continúa en Estados Unidos –exceptuando algunos territorios–, porque, en 1775, el general George Washington decidió prohibir las hogueras para no levantar susceptibilidades innecesarias en sus dos grandes aliados, España y Francia. Washington comprendió que por una cuestión tan nimia podrían perder un vital apoyo logístico y militar.

DECADENCIA Y RENACIMIENTO DE ESTA CELEBRACIÓN

Hacia mediados del siglo XIX, la Noche de la Pólvora languidecía de tal manera que pronto desaparecería. Sin embargo, la bula Universalis Ecclesiae*, publicada en septiembre de 1850 por el polémico Papa Pío IX para establecer la renovación de la jerarquía católica en Inglaterra, reavivó los ánimos antipapistas de los británicos. Los enfureció de tal manera que, entre otras muchas manifestaciones, en noviembre se celebró la Noche de la Pólvora con tal fuerza como jamás se había visto. En 1853 se crearon las primeras «Bonfires Societies» que han velado para que sea una de las más animadas fiestas del país.

Por aquella y otras desafortunadas actuaciones, los italiano se referían al Papa Pío IX como Pío No No, jugando con las referencias a su número y a su actitud negativa.

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LA BONFIRE NIGHT EN LA ACTUALIDAD

Como el tiempo lo cambia todo, esa fogosa noche de noviembre fue llevando a la hoguera las imágenes de los personajes más odiados, desde el Adolf Hitler de los bombardeos hasta el Tony Blair del Pacto de las Azores, pasando por la inefable Margaret Thatcher.

La siguiente canción tradicional, se suele cantar la noche del 5 de noviembre, mientras se queman las hogueras y el aire se llena de fuegos artificiales.

CANCIÓN DE LA NOCHE DE LAS HOGUERAS

Recuerda, recuerda el cinco de noviembre :
el complot y la Conspiración de La Pólvora.
No veo ninguna razón para que la Conspiración de La Pólvora
Deba ser olvidada para siempre.

Guy Fawkes, Guy Fawkes tenía la intención
de volar al Rey y el Parlamento.
Se contaron tres barriles de pólvora en los bajos
para derribar a la pobre vieja Inglaterra.

Por la providencia de Dios, él fue sorprendido
con una linterna sorda y encendiendo la mecha.
Gritad hicos, gritad chicos,  tocad las campanas, tocadlas.
Gritad hicos, gritad chicos, ¡Dios salve al rey!

Un pan de un centavo para alimentar el Papa,
Un cuarto de penique de queso para estrangularlo,
Una pinta de cerveza para ahogarlo,
Un haz de leña para quemarlo.

Quemarlo en una tina de alquitrán,
Quemarlo como a una estrella ardiente
Quemar su cuerpo desde la cabeza
Entonces diremos que el viejo Papa ha muerto

Hip Hop Hurra!
Hip Hop Hurra!
Hip Hop Hurra!

La misma canción, en inglés

Remember, remember the Fifth of November
The Gunpowder Treason and plot
I see no reason why Gunpowder Treason
Should ever be forgot

Guy Fawkes, Guy Fawkes ‘twas his intent
To blow up the King and the Parliament
Three score barrels of powder below
Poor old England to overthrow

By God’s providence he was catch’d
With a dark lantern and burning match
Holler boys, holler boys, ring bells ring
Holler boys, holler boys, God Save the King!

A penny loaf to feed the Pope
A farthing o’cheese to choke him
A pint of beer to rinse it down
A faggot of sticks to burn him

Burn him in a tub of tar
Burn him like a blazing star
Burn his body from his head
Then we’ll say old Pope is dead

Hip Hip Hoorah!
Hip Hip Hoorah!
Hip Hip Hoorah!

_______________________________

NOTA

[*] «Inglaterra durante siglos fue considerada tierra de misión para la Iglesia Católica. Pío IX cambió eso con la bula Universalis Ecclesiae. Se restableció la jerarquía católica en Inglaterra y Gales, bajo el recién nombrado arzobispo y el cardenal Nicholas Wiseman, con 12 escaños episcopales adicionales: Southwark, Hexham, Beverly, Liverpool, Salford, Shrewsbury, Newport, Clifton, Plymouth, Nottingham, Birmingham y Northampton. Algunos violentas protestas callejeras en contra de la «agresión papal» dio lugar a una ley aprobada por el Parlamento el 2 de agosto de 1851, que bajo pena de prisión y multas prohibió cualquier diócesis católica romana en Inglaterra o Irlanda de tomar el nombre de una diócesis anglicana.»

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